pudo haber tenido un final mejor. quizás en una montaña, perdida con su guitarra y con su colección de poetas ingleses del siglo XIX, junto con su chico, el filósofo bello, bellísimo, recordando con ternura esos días de modelo, mientras bebe de un vino italiano, porque hay que tener piernas para decir que el francés no es de sus favoritos. o pudo tener un final aún mejor, reconvertida en una mujer de derechas moderada, acaramelada con uno de esos presidentes tristes y putinescos como aznar, grabando discos no muy buenos que, además, nadie compra. elei supone --está convencida-- que cuando eres la heredera de pirelli, cuando has tenido todos los chicos detrás, hay que saber encontrar nuevos lujos. y dárselos. quelqu'un m'a dit debe ser un disco enorme y ella podría pensar en retirarse, esta vez, para dedicarse a ser una matadora en una plaza en españa, o mejor, en un campo perdido en méjico, encajada en un traje apretadísimo y ensangrentado, provocando con una sonrisa encantadora a todos los de PETA que, furiosos, recuerdan a la ballenita o al zorrito de turno.
la lectora asesina a veces se cansa de tanta historia de perdedores.
cosas para matar el tiempo
martes, febrero 17, 2009
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4 comentarios:
no tratemos de cuadrar el círculo: elei no se habría casado con Sarkozy.
claro que no. no tengo cómo. pero si tú fueras carla...
si yo fuera carla lo dejaría como chaleco de mono en un móvil de primer plano en la sección "el escándalo de la semana". y gratis.
nada hace pensar que carla ha terminado, feña.
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