diciembre como trámite

debe ser porque el plan de la casa en la montaña ya empezó antes si quiera que la lectora asesina lo reconociera oficialmente. o que, en palabras más simples, nunca entendió a atlas sound. o también que este año se dedicó a leer monitos alemanes y gringos como si el eternauta no corriera ya en su arteria aorta. la cosa es que, por el lado a, se ha tomado más tiempo en contestar la encuesta de lo mejor del año; y que de todo -esto como lado b- saca dos conclusiones: que la desconfianza es una virtud y que no haber usado jamás frenillos es su único orgullo.